El euro digital aún no existe, pero será una moneda digital emitida por el Banco Central Europeo con el objetivo de transmitir más seguridad y estabilidad que las criptomonedas.
Aún no está en circulación, pero ya existe un plan básico en torno a este concepto y que pretende su utilización por personas y empresas en las más variadas transacciones, al estar interconectado con el BCE. Será un medio de pago fiable y de confianza, con todas las garantías de seguridad para los usuarios.
Ha aparecido debido a la popularidad que los cripto activos han ido ganando en los últimos años y que ha provocado que los bancos centrales de todo el mundo empiecen a buscar una solución para aplicar:
Esta moneda será un complemento del euro actual y no un sustituto, y también una forma de garantizar pagos digitales rápidos y seguros. Según la información publicada por el BCE, esta moneda pretende crearse con la intención de ser un medio de pago y no un instrumento de inversión.
Aún no hay fecha para su implementación. La fase de investigación está en marcha desde julio de 2021 y durará hasta octubre de 2023, cuando está previsto averiguar cómo los intermediarios financieros podrán prestar servicios al usuario final.
Una vez completada la fase de investigación, se debería pasar a la siguiente fase que podría durar, en promedio, unos tres años. Durante este periodo está previsto realizar pruebas de la aplicación y desarrollar los servicios integrados.